Roló el viento. Lo que en principio era un problema, se convirtió en una oportunidad. Llegaron las medusas y no me quedó otra que bailar con ellas, en una danza infinita, peligrosa. Manteniendo las distancias. Alerta y disfrutando de la efímera belleza de la mar y sus seres. Atento a sus erráticos movimientos. Yo estaba allí por mi voluntad, ellas por el viento. Bailamos un buen rato. Al final, una ligera hipotermia y el cansancio de la adrenalina hizo que saliera de la mar. Sigo soñando que bailo entre medusas.
Una medusa meravellosa!!!! d'un disseny perfecte..capritxós..
ResponderEliminarGaudeixc pensan-te dançant entre aquestes meduses rosades. Però clar q acabares cansat!!!