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domingo, 27 de septiembre de 2015

Terra Nostra. Hospitalidad Saharaui. Mauritania.







En enero de 2009, fuimos un grupo de amigos a Mauritania. Saliendo de Nouadhibou, para dirigimos al Parque Natural del Banc d'Arguin, hicimos una parada en la jaima donde vive familia de nuestro guía Ely. Allí disfrutamos de la hospitalidad saharaui. Leche de camella y té, el exquisito té que se bebe en el norte de África. No puedo ni quiero olvidar los colores y olores de la jaima, del té y de su rito. Parte de la población saharaui, después de la anexión del Sahara por parte de Marruecos se desplazo a Mauritania, donde viven.

Terra Nostra. Cabo Blanco y el cementerio de barcos al norte de Nouadhibou. Mauritania.









Saliendo de Nouadhibou en dirección norte para ir a Cabo Blanco, encontraremos el cementerio de barcos más grande del mundo (con los consiguientes problemas de contaminación). Resulta impresionante ver cientos de embarcaciones varadas o hundidas. Siguiendo hacia el norte llegamos a Cabo Blanco, donde reside la mayor colonia de foca monje (Monachus monachus), especie en peligro de extinción. Mientras esperábamos a verlas apareció un cayuco. Embarcación tradicional para la pesca, aunque ha tenido otros fines. 

sábado, 26 de septiembre de 2015

Terra Nostra. Ben Aicha. Mauritania.



 
 

 


Terra Nostra, pretende ser una sección dentro del blog, donde ir publicando, recordando, acariciando sitios que por una u otra razón son especiales para mi. Como por algún sitio tenía que empezar, he seleccionado estas imágenes de Ben Aicha en Mauritania. Ben Aicha, es un paraje perdido en la nada en Mauritania. Entre 1999 y 2000, veinte artistas de diferentes nacionalidades (canadienses, chinos, mauritanos, franceses, polacos, etc.) se dieron cita a los pies del monolito de Aïcha, para realizar esculturas en la naturaleza. Sitios que no quiero ni puedo olvidar.

martes, 15 de septiembre de 2015

No es eso hija, no es eso.

Tortuga boba, entregada por un pescador y recuperada por el Centro de Recuperación de "El Saler".

Tortugas bobas, procedentes de la puesta en la playa de San Juan en 2014.
Ayer 14 de septiembre, fui con mi hija a la suelta de Tortugas bobas (Caretta caretta) en El Carabassí. Yo le había contado lo interesante que era la suelta, le había dicho que era un gran paso para la conservación de la especie, le había dicho lo importante que es la educación ambiental. Perdón hija, lo que vimos no era lo que yo esperaba, ni lo que en lo que creo ni siento, respecto a la conservación de las especies. Todo fue un dislate. Nada más llegar y ver toda la gente que había, los sistemas de megafonía, el cordón en la playa, la policía local, nos pareció un espectáculo. Supongo que la falta de control en la gente que accedimos a fotografiar las primeras tortugas, la espera por parte de los ciudadanos hasta la suelta de las mismas, hizo que aquello se convirtiera en un espectáculo poco educativo.  Reconozco, que me sentí incomodo haciendo las fotos, era todo una aglomeración. El espectáculo lamentable de coger y enseñar las tortugas entre la gente por parte de la organización. Reconozco que solo pude hacer unas pocos fotos de la tortuga que había entregado un pescador y que habían recuperado. No me esperé a las tortugas con radiotransmisor que soltaron posteriormente. Al rato cuando nos vimos, me encanto que no te hubiera gustado, que estuvieras indignada por el trato a las tortugas. Luego me fuiste contando cosas que yo no vi, ya me había ido. Me contaste como se saltaron el cordón y la gente fue a ver las tortugas, como algunas tortugas retrocedieron. En fin, hija, no es lo que esperaba, lo de ayer fue un espectáculo lejos de la conservación y la educación ambiental.