Buscar este blog

miércoles, 3 de marzo de 2021

Cesio-137


Hacía días que no veía el sol. La última noticia de polvo sahariano con cesio-137 de las pruebas nucleares de Francia en Argelia, se unía a la pandemia del coronavirus. Los accidentes nucleares en, Three Mile Island, Chernóbil, Vandellós y Fukushima nos avisaban de nuestra prepotencia tecnológica, creyendo que podíamos controlar no incontrolable. Como Ícaro en el pasado. 


Las calles vacías nos recordaban que las mascarillas para el virus no eran eficaces para el asesino invisible.


Los semáforos nos advertían de la dirección prohibida de nuestro camino.


Las terrazas desiertas dejaban al descubierto el miedo de los ciudadanos.


Los árboles parecían que no quisieran salir del invierno. No sacaban hojas nuevas.
La Naturaleza nos recordaba, que si seguíamos agrediéndola, ella continuaría de una u otra manera, pero nosotros no.

No hay comentarios:

Publicar un comentario